Tegucigalpa, 3 de noviembre del 2010.- El Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) en la conmemoración de su 50 aniversario y dentro de sus acciones de Responsabilidad Social llevó un hogar digno a cinco familias de la colonia Mirador de Oriente de esta capital con la puesta en obra del proyecto piloto de construcción de 5 viviendas.
El proyecto implementado con la organización no gubernamental Un Techo para mi País (UTPMP) Honduras, pretende generar conciencia social y espíritu de solidaridad a través del trabajo voluntario y gracias al aporte del BCIE serán beneficiadas en esta primera fase 25 personas.
La ocasión fue propicia para que el Presidente Ejecutivo del BCIE, Dr. Nick Rischbieth y un número de funcionario y empleados del Banco, compartieran con los beneficiarios del programa, el que tendrá un importante impacto social en la comunidad al iniciar este proceso de inclusión social que les permitirá desarrollarse como una comunidad sustentable.
Esta primera experiencia en el país, lleva como padrino al BCIE, entidad que a través de su máxima autoridad, su presidente Ejecutivo, Dr. Nick Rischbieth, se comprometió a colaborar con la visión y los nuevos desafíos, de Un Techo para Mi País, donde las familias cuenten con una vivienda decente y así acceder a oportunidades para mejorar su calidad de vida.
La organización liderada por universitarios y profesionales jóvenes, tiene presencia en 18 países de Latinoamérica; su visión es luchar por un continente sin extrema pobreza y con jóvenes comprometidos con los desafíos de sus países.
Un fin de semana construyendo esperanzas
La jornada se efectuó durante un fin de semana en el que 57 voluntarios del BCIE, UTPMP y las familias beneficiarias iniciaron la construcción de un gran sueño que se traduce en que los hondureños cuenten con una vivienda digna y puedan acceder a oportunidades para mejorar su calidad de vida.
La edificación de los hogares comenzó con la colocación de los 15 pilotes sobre los que se apoya la vivienda, luego ubicaron las vigas de piso y al final del primer día se clavaron los paneles del piso.
Durante la primera jornada los participantes tuvieron la oportunidad de conversar y conocer a la familia favorecida que al lado de los voluntarios trabajaron para cumplir con los objetivos planificados para ese día, detallo Eugenio Sánchez, Coordinador de Relaciones Institucionales del BCIE.
Al siguiente día, se colocaron las paredes, el armazón de la estructura del techo, las puertas y ventanas y se concluyó con puesta de las láminas de zinc.
La gerente para Latinoamérica de UTPMT, Karla Fernandini explicó, que el proceso de selección de las familias beneficiadas consistió en sucesivas visitas de campo al asentamiento donde se comprobó la calidad de vida y los factores socio-ambientales en los que se encuentran.
“Hemos elegido 5 casos prioritarios a través de un análisis profundo de la calidad de la vivienda, el nivel de hacinamiento, caracterización de la familia y el esfuerzo por progresar al tiempo que las familias se comprometieron a realizar un aporte de 3 mil lempiras”.
En esta oportunidad se edificaron cinco viviendas pertenecientes a la familia Díaz Colindres, Sierra-Sánchez, Sánchez Flores y las madres solteras Ethel Andino y Francisca Flores, ellos estuvieron involucrados trabajando durante la jornada.
Luego de ver la transformación que sufrieron sus hogares, los que se encontraban en pésimas condiciones, con graves problemas vulnerables a las lluvias y un alto grado de hacinamiento; ahora lucen limpias y áreas bien distribuidas con un espacio para todos los integrantes del núcleo familiar.
Por su parte, los voluntarios del BCIE entre funcionarios y empleados, comentaron su satisfacción de colaborar con una acción tan noble la que integra distintos sectores de la sociedad en la tarea de la superación de la extrema pobreza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario