HNM

HNM

Aplicación Movil

Celeste Andino / Honduras, Nación y Mundo
Powered by Conduit Mobile

domingo, 29 de mayo de 2011

Director Regional de UNICEF para América Latina y el Caribe conoció los problemas y esperanzas de niños, adolescentes y jóvenes de Honduras

“Educación, educación y educación es la demanda de adolescentes y jóvenes de este país”, djio Bernt Aasen

Tegucigalpa, 26 de mayo de 2011.- El Director Regional de UNICEF para América Latina y el Caribe, Bernt Aasen, se reunió hoy jueves con unos cincuenta niños, niñas y adolescentes de Honduras para conocer sus problemas y las ideas que plantean para contribuir a solucionarlos. La necesidad de mejorar la educación y la falta de seguridad son las preocupaciones que más inquietaron a las y los participantes del conversatorio.

El encuentro se celebró en el pequeño Centro Comunal de la colonia Roberto Suazo Córdova de Comayagüela, una de las más vulnerables de la zona capitalina. Allí acudieron adolescentes y jóvenes pertenecientes a diversos grupos y organizaciones como los Programas Municipales de Infancia y Juventud, Red de Comunicadores Infantiles, agrupaciones de estudiantes, colectivos de barrio, miembros del programa apoyado por UNICEF ‘Fútbol para la Vida’ o el circo infantil, entre otros. 

“Siento que los adultos no escuchamos mucho a nuestra infancia, pese a lo importante que es dotarles de espacios como éste para que planteen sus problemas”, dijo Aasen al inicio del encuentro. Durante cerca de dos horas, el Director Regional de UNICEF escuchó los comentarios de los niños y adolescentes, y comparó que sus preocupaciones son similares a las de la infancia de otros países que visita estos días como la de El Salvador o Nicaragua.

Educación de calidad
Una de las reivindicaciones más tratadas en el conversatorio fue el derecho a recibir una educación de calidad. “Hay problemas de cantidad y calidad en la educación de este país. Recibimos pocas clases porque los maestros se pasan el curso en huelga. Y en muchos centros no hay pupitres, pizarras, ni mucho menos bibliotecas. Tenemos que cambiar el sistema educativo, y ello ayudaría por ejemplo a que muchos no nos metiéramos en pandillas”, dijo uno de los adolescentes participantes. 

Aasen les preguntó por el motivo por el que más de la mitad de las y los adolescentes de Honduras no asiste a Secundaria. “Influye el alto coste de la vida –le respondió una joven–. Los padres y madres sacan a sus hijos de las clases para ponerlos a trabajar y poder tener dinero para vivir”. Los jóvenes también pidieron que los materiales escolares fueran gratuitos, de calidad y actualizados.

Falta de seguridad
La inseguridad en el país fue otro de los principales puntos destacados por los adolescentes y jóvenes en el conversatorio. “En mi colonia no podemos salir a comprar, ni ir a la escuela solos porque nos asaltan”, expuso un niño. “Las mujeres corremos más riesgo, somos más vulnerables porque nos acosan o pueden abusar de nosotras. Incluso los policías, que deberían hacernos sentir más seguras, nos dicen cosas desagradables por la calle”, protestó otra joven. 

De hecho, Aasen remarcó el hecho de que la adolescencia percibe a la policía como parte del problema y no como una solución. Por ello, abogó por organizar un conversatorio similar al de hoy en el que pudieran participar agentes de las fuerzas de seguridad para conocer también sus opiniones. “Hace falta personal de seguridad más ético y capacitado –propuso otro joven–. ¡Y que se invierta menos en bombas lacrimógenas, y más en libros!”. 

La imposibilidad de acceder a algunos medicamentos o la vulnerabilidad de muchas zonas ante situaciones de emergencia fueron otros de los problemas abordados en la reunión. Una niña de la Red de Comunicadores Infantiles destacó también el problema que supone para ella y su familia el alto precio del agua y los productos que conforman la canasta básica. “Mi madre gana 100 lempiras diarios, de los que gasta 60 en dos galones de agua. Le quedan sólo 40, con los que tiene que alimentarnos a mí y a otros cuatro hermanos, pagarnos el transporte, medicamentos… Es imposible, no le ajusta”, reveló.

“¿Y qué hace UNICEF por nosotros, para qué sirve este conversatorio si ya conocen nuestros problemas?”, preguntó un joven a Aasen. El director regional comprendió su recelo y le contestó. “Nosotros conocemos los datos por estadísticas, pero no por vosotros. Las niñas y niños no podéis reuniros con políticos, pero yo sí. Y en UNICEF queremos transmitirles vuestros problemas tras haberlos escuchado de vuestra propia voz”, aseguró. 

La conversación entre el Director Regional de UNICEF y las niñas, niños y adolescentes fue clara, directa y enriquecedora para todas las partes. Los jóvenes, sin embargo, reclamaron de UNICEF un compromiso concreto para que sus reivindicaciones no permanezcan en el aire y se queden sin cumplir. 

“Desde UNICEF, nos comprometemos a abrir nuevos foros de debate para que también podáis encontraros con autoridades del Gobierno y escuchen vuestros problemas –concluyó Aasen–. Vosotros podéis ayudar a este país, pero para ello hay que invertir en la infancia y juventud para ayudaros a cumplir vuestros sueños en la vida”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario