Los lazos entre nuestros dos países son profundos. Probablemente ya saben, que casi un millón de hondureños residen en los Estados Unidos. Cientos de miles de estadounidenses han visitado este país tan rico en cultura, historia y naturaleza; además de su gente trabajadora y generosa. Espero conocer en los próximos años a los hondureños en todos los ámbitos de su vida, a medida que viaje a través del país.
Nuestros fuertes lazos comerciales son importantes, ya que miles de hondureños y estadounidenses dependen de estos lazos. Es mi deseo que estos lazos se fortalezcan aún más a medida que Honduras continúe su camino hacia una mayor prosperidad.
Esta mañana, presenté mis credenciales como Embajadora al Presidente Porfirio Lobo, quien ha expresado su compromiso para formar una nación cuyos ciudadanos estarán más seguros, que tendrán una mayor confianza en la aplicación de la ley, que se encontrarán con menos corrupción; y que tendrán más oportunidades de educación, empleo, y libres de pobreza.
Estas son las metas que pueden contribuir a una Honduras próspera, democrática y que respeta al estado de derecho y los derechos humanos. Y, son metas que corresponden a prioridades del pueblo hondureño. Los Estados Unidos continuarán cooperando con el pueblo y su gobierno para alcanzarlas.
Calles más seguras, más puestos de trabajo, más inversiones y un gobierno más transparente están al alcance. El gobierno de Honduras ya está centrando la atención en estos objetivos, y apoyamos sus esfuerzos para avanzar en el corto plazo a futuro. La seguridad está estrechamente vinculada con las oportunidades de trabajo. El gobierno de los Estados Unidos desde hace mucho tiempo se asoció con Honduras para fomentar la inversión y el comercio, y las empresas de los Estados Unidos que representan a la mayoría de las nuevas inversiones directas en el país. Estas empresas están invirtiendo en un número cada vez mayor de sectores, incluyendo servicios financieros, manufactura, turismo, transporte y servicios de seguros.
No sólo eso, el Tratado de Libre Comercio con Centro América ha proporcionado un acceso sin precedentes para las empresas hondureñas al mercado más grande del mundo, los Estados Unidos.
Mi compromiso es trabajar con el Presidente Lobo, otras personas y sectores para identificar aún más las formas de impulsar la actividad económica que lleve a mejorar las oportunidades tanto para los hondureños y estadounidenses.
Es verdad que para poder prosperar, las empresas deben ser capaces de operar en un ambiente libre de corrupción. El gobierno del Presidente Lobo ya está dando pasos hacia un gobierno más responsable por medio del aumento de la transparencia fiscal y la publicación de un amplio plan anticorrupción.
Con agrado recibimos la noticia que el gobierno también se comprometió a que Honduras participará en la nueva Alianza Mundial para Gobiernos Abiertos, una iniciativa internacional para promover la transparencia, luchar contra la corrupción, aumentar la participación cívica, y promover el uso de nuevas tecnologías para que los gobiernos de todo el mundo sean más eficaces y más abiertos.
Siempre he creído en el poder curativo de crecimiento económico combinado con la inclusión social, y espero que ustedes encuentren en mí, una embajadora que hace contribuciones en estas áreas a fin de que Honduras se de cuenta su enorme potencial económico el cual ha demostrado a través de plantaciones de café, la tilapia y las granjas de camarón, y atracciones turísticas.
Al cooperar en estas tareas vitales, será una gran satisfacción poder trabajar con ustedes—los periodistas. Ustedes desempeñan un papel muy importante en asegurar que los gobiernos sirven a los intereses del pueblo, ya que se deben a cualquier democracia. Por eso, les agradezco y muchas gracias por venir.
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