Devolver la paz a Honduras promete presidente electo

Así como prometió durante su campaña política que hará lo que tenga que hacer para devolverle la paz al país, el presidente electo, Juan Orlando Hernández, dijo que pondrá esa misma decisión para atender a los hondureños más pobres. Hernández, que fue invitado por el Cardenal Óscar Andrés Rodríguez a la celebración de la Jornada Mundial de la Paz que se realizó en Tegucigalpa, hizo un llamado en su discurso a la solidaridad con aquellos hondureños que sobreviven con menos de veinte lempiras al día. “A veces, así como al Papa, cuando ha dicho ciertas verdades, se nos estigmatiza a algunos de nosotros… Y yo quiero adelantarles que no soy comunista, pero hay muchos temas que el Santo Padre ha mencionado con los que yo comulgo totalmente”, señaló. Y continuó diciendo: “Así como he dicho que para traerle seguridad al país vamos a hacer lo que tengamos que hacer, también tenemos que trabajar fuertemente y hacer lo que tengamos que hacer para que la gente humilde y pobre, que es el 50 por ciento de los hondureños que viven con menos de veinte lempiras al día, tengan alto de parte de la sociedad”. El Presidente electo recalcó que para derrotar a la delincuencia no se ocupa únicamente de la represión de parte de los órganos de seguridad del Estado, sino que, además, se requiere reducir las desigualdades sociales que generan la miseria y la desesperación en millones de hondureños. “Su Eminencia –le dijo Hernández al Cardenal Rodríguez-: Cuánta falta no hacen aquí algunos empresarios que no es fácil que comprendan esa solidaridad y fraternidad, porque al final hay que reconocer algo: que este país, junto a Guatemala, es uno de los que tiene mayor desigualdad en el mundo y eso es injusto  e indigno”. Hernández señaló estar “Listo y consciente de la enorme responsabilidad que tengo como Presidente electo” pero advirtió que “Nosotros, como Gobierno, solo somos una parte y la otra parte, la sociedad, también debe hacer su aporte para que vayamos reduciendo esas desigualdades”. Tal y como lo había solicitado previamente en una reunión con el Consejo Nacional Anticorrupción, el Presidente electo le pidió al Cardenal Rodríguez que la iglesia Católica sea veedora de los 4 mil millones de lempiras que serán destinados para atender a los hondureños más humildes y pobres. “Hay 800 mil familias cuyas casas no tienen piso de cemento, ni letrina, y sus techos y paredes son de plástico, como el caso de Rony, un muchacho al que fuimos a visitar con mi esposa Ana y que es beneficiario del programa Vida Mejor”, expresó. “Esa es la otra Honduras que muchos no conocen”. Antes de finalizar, Hernández se comprometió a garantizar el uso transparente de cada centavo que los hondureños tributen.