Con el fin de fortalecer las capacidades de respuesta en las emergencias , identificar las aéreas de riesgo y buscar una solución a la vulnerabilidad en el Valle de Sula, se reunieron en San Pedro Sula instituciones privadas, organismos gubernamentales y no gubernamentales, patronatos, comités de emergencias regionales, departamentales, locales y mesas regionales de gestión de riesgo.
En el marco del Foro Análisis General de las Obras Hidráulicas del Valle de Sula, que organizaron el proyecto “ Sistema de Alerta Temprana para Comunidades Resilientes a Desastres en la zona nor- atlántica de Honduras, DIPECHO VII financiado con fondos de la ayuda humanitaria de Unión Europea y Christian Aid, Oscar Mencía, director de Preparación y respuesta de COPECO, expuso sobre la perspectiva climática en el 2011.
La mayor concentración de lluvia se podrían observar en el norte de Santa Bárbara, oeste de Santa Rosa de Copan, Ocotepeque, sur de los departamentos de Lempira, La paz, Intibucá, y el litoral del Golfo de Fonseca. En estas zonas las cantidades podrían oscilar entre los 500 y 1000 milímetros en tres meses, esto podría generar deslizamiento por saturación de suelos, inundación por desbordamiento y vientos fuertes.
El Director de la Comisión de Control contra las Inundaciones, Carlos Ramírez, advirtió que en el Valle de Sula están preparados para atender una temporada de lluvias moderada o normal, pero no para soportar huracanes o tormentas tropicales, porque la limitación económica solamente les permitió hacer algunas obras de mitigación en orden de prioridad.
Por su parte Claudia Herrera, representante de CHRISTIAN AID y coordinadora del proyecto Dipecho VII, señaló que este proyecto contribuye con 428 mil euros para fortalecer las capacidades de respuesta de las comunidades de Potrerillos, Pimienta y San Manuel ante los fenómenos naturales.
Asimismo, señaló que este tipo de encuentros sirven para coordinar esfuerzos que propicien la creación de un sistema de alerta temprana funcional en el Valle de Sula; en este caso, el proyecto es ejecutado por las organizaciones locales, Comisión de Acción Social Menonita y el Organismo Cristiano de Desarrollo Integral.
Durante el foro y otras reuniones de este tipo, las comunidades exponen su problemática para que las instituciones que tienen responsabilidad escuchen y resuelvan; se trata además de concienciar a los gobiernos locales para que destinen presupuesto no solo para emergencias sino también para la prevención de desastres.
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