Shin Fujiyama, el filántropo japonés reconocido por su incansable labor en favor de la educación en Honduras, culminó este lunes 4 de noviembre de 2024 su increíble desafío de correr 3,000 kilómetros a través de cuatro países, con una propuesta de matrimonio que emocionó a todos los presentes. El evento, que se llevó a cabo en la ciudad de El Progreso, Yoro, fue el cierre perfecto para una jornada llena de esfuerzo, solidaridad y sorpresas.
Fujiyama comenzó su travesía el 17 de julio de 2024, partiendo desde Reynosa, México, con el objetivo de llegar a San Pedro Sula, Honduras, recorriendo 42 kilómetros diarios, el equivalente a una maratón cada día. Durante 114 días, atravesó México, Guatemala, El Salvador y Honduras, enfrentándose a desafíos físicos y emocionales, siempre impulsado por su misión de recaudar fondos para construir escuelas en comunidades desfavorecidas.
Un Final Emotivo y Sorprendente
La emoción alcanzó su punto máximo cuando, al llegar a Villa Soleada en El Progreso, Yoro, Fujiyama, rodeado de familiares, amigos y seguidores, sorprendió a todos con una romántica pedida de mano a su pareja, Yeimi Licona, madre de su hija y residente de San Pedro Sula. Al final de su hazaña, Fujiyama, exhausto por los kilómetros recorridos, se arrodilló frente a Licona en un acto inesperado. En medio de la sorpresa, Fujiyama saca de un maletin a su lado un anillo y él, aún de rodillas, preguntó: "¿Te casarías conmigo?", ante los aplausos y vítores de los presentes.
Un Final Emotivo y Sorprendente
Con una sonrisa llena de emoción, Licona aceptó.
La emoción alcanzó su punto máximo cuando ella respondió con un “¡Sí!”, rotundo, lo que desató la ovación de quienes habían estado siguiendo el recorrido y la causa del japonés desde el inicio.
Recaudación Récord y Un Legado de Amor y Educación
El logro de Fujiyama tiene un componente social trascendental. Gracias a su increíble esfuerzo, el filántropo logró recaudar más de 537,000 dólares, lo que equivale a más de 131 millones de lempiras, destinados a la construcción de nuevas escuelas en Honduras, un país que él ha adoptado como su segunda patria. A través de su fundación, ha logrado edificar o reconstruir ya 75 escuelas, y su meta es alcanzar las 1,000 en diversas comunidades del país.
El esfuerzo de Fujiyama también fue reconocido por figuras internacionales, como el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien elogió públicamente la labor humanitaria del japonés. "Lo que haces vale mucho más que cualquier trabajo de un gobierno, porque proviene del corazón y de la buena voluntad", expresó Bukele en una transmisión en vivo en TikTok, donde también mostró su apoyo a la causa de Fujiyama.
Un Reto Personal Superado
Shin Fujiyama ha sido abierto sobre su historial médico, revelando que nació con una afección cardíaca que le impedía hacer deportes. "Los médicos me dijeron que no podría hacer deportes, pero hoy, si logro recorrer estos 3,000 kilómetros, seré el primer ser humano en hacerlo", comentó en varias entrevistas, mostrando su determinación y coraje para superar cualquier obstáculo.
Este reto ha sido el más grande de todos los que ha realizado Fujiyama, pero para él no solo es una hazaña física, sino un acto de amor y compromiso con la educación de los niños de Honduras. Su pasión por la causa y su dedicación incansable han inspirado a miles de personas en todo el mundo.
La Familia y el Futuro
Así que tras completar esta misión, Fujiyama también se prepara para un nuevo capítulo en su vida personal y profesional. Con su pareja, Yeimi Licona, esperando a su primera hija, y con un legado de más de 75 escuelas construidas, Fujiyama sigue firme en su propósito de transformar la educación en Honduras y dar a los niños de este país un futuro mejor.
Su historia es un testimonio de valentía, perseverancia y amor, no solo por su familia, sino por una nación entera. En sus palabras, “si logramos mejorar la educación, podemos cambiar el futuro de todo un país”.